Debe su nombre, según datos recogidos, a la pequeña laguna que formaba el ensanchamiento del arroyo denominado Garganta, a la parte debajo de la iglesia parroquial, y de la que aún se conservan claros vestigios, en la parte cegada por el arrastre de tierra y en parte limitada por los prados de esta parte que fueron introduciéndose en su margen hasta quedarla limitada al estado actual. A esta pequeña laguna venía a desembocar el Arroyo de la Sancha, hoy apenas perceptible, y de donde toda esa parte tomó el nombre abreviado de "Rosancha" con el que hoy se denomina.
Las primeras edificaciones se levantaban en el espacio comprendido entre la Fuente el Guijo, Plaza del Caño y Plaza del Caño y Plaza la Reina.la iglesia era construida más en las afueras, como en casi todos los lugares, ya que había de servir también de enterramiento a los fieles. Más tarde comenzó a edificarse más allá de la Fuente del Guijo, recibiendo ese parte el nombre de casas nuevas.
Hermoso sobremanera debía ser el paisaje que ese lugar ofrecía desde antiguo cuando tan hermoso lo presentaba hasta no hace muchos años conservando aún de ello muchos vestigios.
La situación estratégica del lugar sería la siguiente: En el centro de Lagunilla. De una parte la gran explanada de la Rosacha, tan poblada de castaños que ni aún en el mediodía penetraban los rayos de sol. De otra la Granjera con sus vegas; más allá el Olivañez. De otra parte el Molino con el Arroyo y bosque de la Lagartera. La suave rampa que comenzando en la misma laguna subía por el Castillejo hasta la Mata de los Mártires y en su parte baja por las eras de abajo venía hasta el Psil a unirse con la Rosancha. Todo ello tan cubierto de espesos castañares y robledales que convertían el lugar en uno de los más amenos y deliciosos del contorno. Aún no hace muchos años se conservaban intactos los de la Rosancha y Castillejo en cuyas calles aún queda algún tronco.
No es de extrañar que tan atractivo lugar, aparte de sus feraces vegas: Fuentes del Canto, Valdeparicia y Santa Ana entre otras, tuviera desde muy antiguo sus habitantes aunque no pueda de momento precisarse. ¿Fue alguna o algunas familias las que por propia iniciativa se asentaron en este lugar? ¿Fue algún asentamiento de colones dispuestos, como en otros lugares , por los reyes al extender la reconquista?
Puntos son éstos a los que por ahora no podemos contestar. Lo cierto es que su fundación es anterior a la constitución del señorío de Montemayor y no cerremos que tenga fundamento la afirmación de que la creación del pueblo se deba al asentamiento de algunos colones ordenado en esta parte de sus tierras por los Sres. Marqueses de Montemayor. Fechan cantan.
HISTORIA
Por los años 1142, cuando Alfonso IX arrojaba definitivamente de estas regiones a los árabes y restablecía la antigua diócesis de Coria, incorporándola a la Provincia Eclesiástica de Santiago, existía ya esta parroquia y por tanto el pueblo.
El año 1852 figura el Arciprestazgo de Lagunilla que comprende de Montemayor, Valdefuentes, Cristóbal , Horcajo, Colmenar, Valdelageve, El Cerro, Peñacaballera, Aldecipreste y Calzada.
En año 1458 el rey Enrique IV autoriza el marquesado de Montemayor del que forma parte Lagunilla. No muchos años después los Sres. Marqueses construían un palacio en la parte llamada Casas nuevas y que ocupó alguno de los carillones pasada la Fuente del Guijo. Para el servicio de la casa construyeron la Fuente del Guijo, no sabemos si en la forma actual o si fue un arreglo, lo cierto es que su escudo simple campea en la frente de dicha fuente.
En referido palacio solían habitar los Marqueses durando el tiempo de verano y a él venía el Sr. Corregidor de Montemayor cuando asuntos de jurisdicción requerían su presencia y asimismo los escribanos del Marquesado, de lo que tenemos testimonios.
Hace unos 120 años, al reconstruir alguno de esos casillones, apareció entre sus escombros el escudo que hoy preside la Fuente de los Mártires y que debió ocupar la fachada del Palacio. Dicho escudo es cuartelado y sus emblemes son: Superior derecha el castillo o fortaleza , símbolo del marquesado; Superior izquierda cinco flores de lis; inferior derecha se repite el mismo cuertel de flores de lis; inferior izquierda el león rampante y a los lados de la punta del escudo dos pajaritos de espalda el uno al otro. El mismo escudo que campea en el castillo de Montemayor.
Durante la Guerra de la Independencia no parece que por estos lugares se diera encuentra alguno con los invasores, fuera de algún grupo aislado que llegaron hasta este lugar y al que parece se lo hizo alguna resistencia en la entrada del pueblo, dando lugar a la destrucción del Palacio que los Marqueses de Montemayor poseían en este pueblo, en el sitio que hoy llamamos El Pasil y saqueo e incendio del grupo de casas de la Fuente del Guijo. El Hospital se convirtió en Hospital Militar, sirviendo para los distintos Regimientos y Compañías que guarnecían estos contornos, especialmente los años 1809,1810 y 1811.
El 12 de octubre de 1710 pasaba por este pueblo el Rey Felipe V camino de Ciudad Rodrigo. Varios soldados de su acompañamiento murieron en este pueblo en el Hospital los días 4, 16, 17 de noviembre y fueron sepultados en la iglesia.
Ayuntamiento de Lagunilla
Calle Castillejo s/n. 37724 Lagunilla (Salamanca)